domingo, 27 de abril de 2008

LILIANA HERRERO

Tantas veces como pueda recomendaré la experiencia de escuchar a esta artista argentina que no deja de buscar, que no se cansa de explorar cada melodía tonalidad armonía.
Hace minutos presentó su nuevo disco "Igual a mi corazón" en el Teatro Libertador de Córdoba.
Un recital hondo, cargado de melancolía, a las apuradas (problemas para llegar por el humo en las rutas), con un público receptivo de la apuesta y las formas.
Quiero vale cuatro, dice Liliana, mientras toma su vino.
Quiero Liliana, quiero, para que puedas seguir jugando.

sábado, 26 de abril de 2008

CULO FAVIO CONCHA POSCA

El actor músico conductor estuvo en Córdoba presentando "Los quiero muchísssimo", su nuevo espectáculo. El título de la obra es una frase repetida por Pitito, un loco loco lindo lindo salido del Neuro que tiene mucho amor odio para dar.
Vanguardista, procaz, locuaz, genial, visual, fálico. Favio Posca conoce los secretos de la noche como si la hubiera parido.

viernes, 25 de abril de 2008

EL MINISTRO QUE SUSPIRA


Anoche lo llamaron a su casa y le pidieron que fuera a la Quinta de Olivos, que iban a proponerle algo que seguro sería interesante, pero tenía que ser ahora, lo estaban esperando. Cuando sonó el teléfono estaba con su esposa y los hijos viendo Bailando por un Sueño y terminando la cena sana, él siempre se cuidó con las comidas pero ahora más porque tiene bajo el colesterol bueno y alto el malo. El médico le dijo que no jodiera con eso. Vieja! -gritó- me tengo que ir, dicen que es importante. Fijate si hace frío, dijo ella, cualquier cosa llevate un abrigo.
Carlos se metió en el auto y allá fue.
Mientras manejaba, respetando todas y cada una de las señales de tránsito a pesar del apuro, se puso a escuchar a Roberto Carlos cantando "Un millón de amigos", su favorita, y ahí fue cuando se le empezaron a amontonar los recuerdos: siempre fue buen alumno aunque no le gustaba estudiar, no le dio demasiados problemas a sus padres, alguna travesura pero nada del otro mundo, de chico fue asmático y entonces tenía acotadas las actividades, no le gustaba compartir el mate y tenía su propia bombilla, pocas novias, se casó con una que le cayó bien de entrada a su mamá, siempre fue malo malo para los deportes, un patadura al que dejaban para el final, no quiso estudiar Ciencias Económicas pero la familia lo obligó, cumplió el mandato, militó en la JP de La Plata, más tarde llegó la curiosidad por la política orgánica y por coleccionar estampillas.
Entre recuerdos llegó, se bajó del auto y allá fue.
Lo demás es historia reciente conocida. Hoy juró ante la PresidentA que iba a ser buen alumno. Como cuando chico. Si se fijan en la foto está suspirando una añoranza. Abrazó mucho, lo abrazaron también.
Después del acto, se reunió con su familia en el Salón Blanco, los miró a la cara y les dijo que todo iba a ser igual, que puertas adentro seguirían mirando la tele, escuchando a Roberto Carlos, comiendo sano, pero que iban a sacar el número de teléfono de la guía, tendrían una custodia hasta para ir a cagar y que se iba a tener que levantar a las 4 de la mañana del lunes para volver el domingo siguiente. Sería la vida de siempre pero un poquito peor.
Volvieron en silencio. Nadie preguntó nada.
Carlos se quedó en el auto y pensó: el que suspira no es traidor.
Se rascó la oreja colorada colorada y allá fue. Entre recuerdos.

miércoles, 23 de abril de 2008

ABRAHAM. UNIVERSIDAD

El centro de la ciudad y la postal de la hora en cuestión. Cerca de las 6 de la tarde la gente quiere irse, escapar de todo lo que pudo o no quiso o no debió hacer durante el día. En la peatonal de Córdoba y de todas las grandes ubres, los oficinistas tienen la corbata floja, los estudiantes aprovechan el calorcito poco común y se llenan de hormonas habituales, otros hacen planes por teléfono para una noche que valga la pena haber aguantado lo aguantado.
En medio de ese movimiento: Tomás Abraham, filósofo del carajo, agudo observador de las cosas nuestras y ajenas, haciendo tiempo para dar la última clase de un seminario que lo mantuvo entre nosotros esta semana. En 2006 tuvo la gentileza de aceptar la invitación que le hice para participar del ciclo de conferencias que coordiné. Me acerqué, nos saludamos y lo acompañé unas cuadras. Me contó que está escribiendo sobre lo que sabe y quiere en su página http://www.tomasabraham.com.ar/ y en el blog que se llama Pan Rayado. Al cabo de unos minutos de caminata estábamos en la puerta del aula donde hablaría sobre foucault y deleuze: el área comercial de Radio Universidad, que hoy cumple 50 años. En un rato voy a comer bocaditos con gente amiga.
Una cosa no tiene que ver con la otra.
Es un amontonamiento de coincidencias.

lunes, 21 de abril de 2008

BLOGSITO

Sé que te sentís abandonado, que esta no era la relación que esperabas, que tenías la esperanza que el contacto fuera más frecuente, no digo a diario pero cada tanto algo, una muestra de afecto, una palmada en el hombro, un arreglamos y nos vemos otro día, tengo tu número, hablamos, voy a verte.
Ocurre que no tengo claro qué contarte, a veces necesito armar un discurso que pueda resultarte interesante, no soy espontáneo, tengo algunas ideas sueltas que no llegan a convertirse en una idea, son palabras desordenadas que no llegan a ser una oración, son planes trasnochados casi imposibles a los que me aferro como toda razón para seguir, son las mismas obsesiones que persigue a toda velocidad el hamster dando vueltas en la ruedita.
Soy el mismo tipo que no supo para qué cuernos te inventó.
Soy el mismo tipo que no sabe para qué cuernos está.
Tonto, no te pongas mal. Te quiero mucho igual.
Mila.