Córdoba es una ciudad egocéntrica y copiona.
No quiso quedarse afuera de la postal del no diálogo y repitió la fórmula. El gobierno provincial anunció por tele una reforma que recorta los haberes de los jubilados que ganan más y modifica el esquema para los que dejen de laburar.
El mismo método del Gobierno central, cuando le quiso meter la mano en el bolsillo a los ruralistas con las famosas retenciones a las rentas extraordinarias.
Hoy una marcha impresentable de los gremialistas, rompiendo todo a su paso, encapuchados, avergonzados de ser, protestando en el centro de la ciudad para evitar la sanción de la ley.
Atrás, una serie de marchas impresentables de los ruralistas y los kirchneristas que todavía no deja de tener consecuencias.
Parece que la palabra no se usa más. Que el diálogo pasó de moda. No me gusta y rompo. No me gusta y corto. No me gusta que me metan la mano en el bolsillo. No me gusta que lo anuncien por tele.
No probaron hablando? Tienen miedo de perder? Qué es?
miércoles, 30 de julio de 2008
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2 comentarios:
Hablar y escuchar. Mis oídos necesitan la nutrición Montali.
Hablar y escuchar
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